Las instalaciones eran maravillosas, especialmente la

piscina que era enorme y perfecta para relajarse. Disfrutamos del ambiente rural y la calidez del personal, aunque el menú del desayuno podía mejorar un poco. Aún así, valió la pena por la relación calidad-precio.

El lugar tiene un ambiente muy reconfortante y la piscina es grande, ideal para relajarse. Sin embargo, noté que la limpieza en la habitación podría ser mejor, ya que había algunos detalles que no se habían atendido. La atención del personal fue excelente y hicieron que nuestra estancia fuera más agradable.

La habitación era enorme y muy cómoda, con una cama matrimonial extra grande. El baño también era amplio y tenía todo lo necesario. Tenía acceso a una terraza grande que daba a la piscina, lo que fue genial para relajarnos. Todo estaba muy limpio, pero un par de detalles en la limpieza podrían mejorarse. En general, me sentí muy a gusto.

El ambiente rural es realmente tranquilizante y relajante.

Desafortunadamente, tuvimos problemas con la limpieza en nuestra habitación. Encontramos papeles debajo de la cama y nos pareció que no se había limpiado adecuadamente. Además, el acceso al hotel es un poco accidentado, lo que hace que llegar sea una experiencia algo incómoda, especialmente después de un largo viaje.

La piscina tiene un ambiente relajante y cómodo.

El Complejo Nazaret es un lugar encantador para relajarse. La piscina grande y el ambiente tranquilo fueron ideales para mi descanso. Aunque el desayuno podría tener más opciones, disfruté de la atención cálida del personal que hizo que me sintiera como en casa.

El Complejo Turístico Rural Nazaret es un lugar ideal para desconectar. Rodeado de pinos y eucaliptos, su ubicación es muy tranquila. Las camas eran cómodas y el baño amplio. Además, cuidaron a nuestras chihuahuas con un regalito de golosinas, un detalle muy bonito. La piscina, que abrirá en junio, promete ser un gran punto para relajarse en familia.

recomendado

El Complejo Turístico Rural Nazaret es como un refugio encantado en medio de la naturaleza, donde cada mañana comenzó con un desayuno que era una fiesta, tostadas crujientes, mermeladas caseras y zumos frescos que hacían que mi paladar bailara la sevillana. La cena fue una delicia, con platos que parecían sacados de un concurso de gastronomía, cada bocado más sabroso que el anterior.

Rutas de acceso complicadas

La atención de la familia fue increíble, pero la piscina estaba muy concurrida.

Las habitaciones son amplias y bien climatizadas, con grandes ventanas y vistas increíbles. El personal fue increíblemente amable y siempre dispuesto a ayudar. El desayuno fue abundante y delicioso, un verdadero placer comenzar la mañana.

La ruta de acceso es algo bumpy, lo que podría ser un inconveniente para algunos. notamos que algunos clientes eran algo ruidosos por la noche, lo que podría afectar la tranquilidad del lugar.

La habitación era amplia y con mucha luz, además disfrutamos de un rico desayuno. La piscina y el jardín fueron perfectos para relajarnos después de un día de actividades. Solo notamos un pequeño detalle con la limpieza de las áreas comunes, pero no nos afectó en nada. 🌞

tranquilidad en medio de la naturaleza

El lugar es un paraíso para quienes buscan desconectar, con vistas impresionantes de la zona. La atención del personal fue excepcional, siempre dispuestos a ayudar y compartir recomendaciones personalizadas. La piscina, además de ser amplia, ofrece un ambiente muy relajante y cómodo.

El acceso al hotel tiene algunos caminos que pueden resultar difíciles.

La habitación era amplia, ideal para una escapada tranquila. La piscina es grande y transmite una sensación de paz, aunque podría tener un poco más de mantenimiento.

El camino hacia el hotel es un poco abrupto, lo que podría ser un problema para algunos. Además, en nuestra habitación encontramos papeles de zumo debajo de la cama y un helado en el mini frigorífico que claramente llevaba tiempo ahí. Esto dejó un mal sabor, ya que esperaba un poco más de limpieza en esas áreas.

El Complejo Turístico Rural Nazaret De Moguer es un lugar encantador. Las habitaciones son amplias y cómodas, con una gran cama y un baño privado que incluye una bañera de hidromasaje. La atención del personal es excepcional, especialmente de Manuel, quien hizo que me sintiera como en casa. El restaurante ofrece una comida deliciosa a muy buenos precios, y el desayuno fue espectacular, con mucha variedad y calidad. Las vistas desde la terraza son maravillosas, ideales para relajarse.

Algunos detalles en la limpieza podrían mejorar.